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‘SPIDERMAN: NO WAY HOME’, segundas oportunidades

Año: 2021

Duración: 148 minutos.

País: Estados Unidos.

Dirección: Jon Watts.

Guion: Chris McKenna y Erik Sommers. Cómic: Steve Ditko y Stan Lee.

Música: Michael Giacchino.

Fotografía: Mauro Fiore.

Reparto: Tom Holland, Zendaya, Benedict Cumberbatch, Marisa Tomei, Jacob Batalon, Jon Favreau, Angourie Rice, Alfred Molina, Benedict Wong, Andrew Garfield, Jamie Foxx, J.K. Simmons, Thomas Haden Church, Rhys Ifans, Charlie Cox, Christopher Cocke, J.B. Smoove, Tobey Maguire, Hannibal Buress, Martin Starr, Tony Revolori…

Productora: Pascal Pictures, Marvel Studios, Columbia Pictures. Distribuidora: Columbia Pictures, Sony Pictures Entertainment (SPE)

Género: Fantástico/Acción/Ciencia ficción/Superhéroes/Secuela/Cómic. Sinopsis: Por primera vez en la historia cinematográfica de Spider-Man, nuestro héroe, vecino y amigo es desenmascarado, y por tanto, ya no es capaz de separar su vida normal de los enormes riesgos que conlleva ser un superhéroe. Cuando pide ayuda al Doctor Strange, los riesgos pasan a ser aún más peligrosos, obligándole a descubrir lo que realmente significa ser él.

CRÍTICA (SIN SPOILERS):

Trece años han pasado desde el comienzo del UCM, diecinueve desde que viéramos a «Spider-Man» en pantalla grande por primera vez y cinco desde que Tom Holland diera vida por primera vez al personaje en «Civil War» dejando un buen recuerdo. Es una pena que en el UCM haya habido algunos bajones (especialmente este año) y que las dos anteriores cintas de este joven arácnido no estuvieran a la altura de las expectativas, pero para mi sorpresa y para la gran mayoría esta secuela sí ha dado la mejor versión del personaje. Esto se ha conseguido gracias a la buena interpretación del actor protagonista, las mejores líneas de diálogos y a momentos brillantes de unos personajes que anteriormente habían dado más vergüenza ajena que otra cosa, aunque el Flash Thompson de Tony Revolori sigue siendo lo más bochornoso, ridículo y repelente que ha dado la historia del cine de superhéroes junto al becario de «Thor 2» (2013) y la «Catwoman» (2004) de Halle Berry entre otras memeces.

Lógicamente, dada la falta de registro autoral en las grandes superproducciones, Jon Watts tampoco es que sea un director talentoso. Se intuye que Kevin Feige ha «cortado el bacalao» como otras tantas veces y junto a Amy Pascal han unido fuerzas logrando lo que cualquier generación hubiera soñado destacando la parte nostálgica de la cinta que cumple a la perfección su propósito alejándose de un fan service barato y forzado para dar capas a los personajes.

No quiero desvelar nada del «gran pastel de sorpresas» que acompañan el metraje para que el espectador disfrute al máximo de la experiencia porque más que una película de superhéroes es un evento, un acontecimiento realmente impensable que al igual que»Endgame» (2019) ha marcado un hito en el subgénero. Las grandes emociones que despierta el film han cegado a la mayoría de los fans (no puedo creer la tolerancia hacia la victoria de personajes con menos fuerza y poderes que otros) y ciertas carencias a nivel de guion, conveniencias, Deus Ex Machina y poco aporte de algunos secundarios («Lagarto» y «Flash»), las pocas capas o poca credibilidad que aportan algunos secundarios («Electro» y «Sandman») en su conflicto más el plus de un humor constante que dejan una historia bastante trágica y dramática en un show de «Saturday Night Live» con multitud de guiños, referencias, chistes y memes que se desequilibran un poco el tono y la atención de la cinta.

Pero esto no quiere decir que la película no hable de temas profundos, francamente interesantes, arriesgados, ambiciosos y novedosos dentro de las repetidas veces que hemos visto al «trepamuros» en el celuloide abordando temas como el sacrificio, el altruismo, la familia y seres queridos o el significado de ser «Spider-Man», lo cual esto no es novedoso, pero que en esta última versión del personaje inmaduro y torpe hacía falta de sellar en la cara de un adolescente que solo piensa en sí mismo a plantarle la cruda realidad y por supuesto las segundas oportunidades que quizás merezcan personas que creíamos que eran villanos pero solo tenían ciertas deficiencias a tratar siendo esto último lo más interesante de toda la cinta.

Ver a los villanos, sobre todo «Octopus» y «Duende verde» añadiéndole capas a sus personajes, teniendo más minutos y aporte narrativo a la película es realmente fascinante más allá de la nostalgia y la interpretación o referencias. Por supuesto que ver a MJ no resultar tan repelente (el salto que ha dado de «Homecoming» a esta es considerable, pero poco natural) y que Ned no de vergüenza ajena resulta más entrañable sumando por fin algo de sustancia a la tía May que pasa a ser la verdadera guía moral del personaje alejándose de la sexualización que hicieron con ella en la primera cinta (la escena del Kebab era inaguantable entre otras) por lo cual ha habido una evolución favorable en la trama y personajes por más que «Doctor Strang» saliendo 20 minutos sea un plot point, una excusa para presentar lo que viene próximamente.

En definitiva, «Spiderman No Way Home» es un hito para el personaje, el mayor homenaje que podrían haberle hecho, un delirio visual pero que dista de tener las mejores escenas de acción que el personaje merecía, un sentido del humor bastante excesivo y cuestionable y un reinicio que da pie a una próxima trilogía que mejora la inexperiencia que ha demostrado en estas tres cintas. Un conjunto de segundas oportunidades para los villanos, dando capas e ingenio en un género bastante trillado, pero que sigue emocionando aunque menos de lo que podría haber sido. Como entretenimiento es brutal, como película protagonizada por Holland es la mejor, como película de «Spider-Man» la segunda de Raimi con Maguire sigue siendo la más psicológica y madura de todas por lo cual ha resultado más un evento para ver algo único y soñado que para ver algo coherente o bien rodado y escrito. Dentro de unos meses cuando la memoria cegada haya desaparecido saldrán los detractores como aparecieron con «Infinity War» (2018) o «Endgame».  He expuesto mi opinión sobre ella con cautela porque a pesar de que he disfrutado mucho con su visionado,  hay una explosión de efectismo en ella que no puedo negar que puede llegar a cegar a los fans como el humo de «Misterio» en «Lejos de casa» (2019).

LO MEJOR: «Octopus», «Duende verde», la multitud de sorpresas, la perseverancia de unos personajes lastrados por sus dos predecesoras y la madurez del personaje impresa en Holland en su mensaje de defensa de la vida.

LO PEOR: El humor, Flash Thompson, el poco aporte de «Sandman», «Electro» y «Lagarto», las conveniencias de guion y falta de credibilidad en algunos casos.

NOTA: 8. @starnine27

«SPIDER-MAN: NO WAY HOME»: «PARA SPIDER-FANS POCO EXIGENTES»

Presentan poster oficial de Spiderman: No Way Home - Noticias de Querétaro
Año: 2021. Duración: 148 minutos. País: Estados Unidos. Dirección: Jon Watts. Guion: Chris McKenna y Erik Sommers. Cómic: Steve Ditko y Stan Lee. Música: Michael Giacchino. Fotografía: Mauro Fiore Reparto: Tom Holland, Zendaya, Benedict Cumberbatch, Marisa Tomei, Jamie Foxx, Tony Revolori, J.K. Simmons, Alfred Molina, Jacob Batalon, Jon Favreau, Willem Dafoe, Benedict Wong, Thomas Haden Church, Rhys Ifans… Productora: Pascal Pictures, Marvel Studios y Columbia Pictures.  Distribuidora: Columbia Pictures y Sony Pictures Entertainment. Género: Fantástico/Acción/Ciencia Ficción/Superhéroes. Sinopsis: Por primera vez en la historia cinematográfica de Spider-Man, nuestro héroe, vecino y amigo es desenmascarado, y por tanto, ya no es capaz de separar su vida normal de los enormes riesgos que conlleva ser un superhéroe. Cuando pide ayuda a Doctor Strange, los riesgos pasan a ser aún más peligrosos, obligándole a descubrir lo que realmente significa ser Spider-Man.  CRÍTICA (SIN SPOILERS): Por fin ha llegado. Por fin ha llegado el estreno de la película más esperada por el gran público. Por fin Spider-Man: No way home es una realidad. Los tan anhelados tráilers, las numerosas especulaciones entorno a esta cinta y la ansiedad tan patente en redes sociales por parte de los fanáticos ya forman parte del pasado, un pasado, el de Marvel en el cine, que se topa con el fructífero presente de la casa de las ideas (económicamente hablando) y abre la ventana a un futuro más que prometedor, al menos a la hora de expandir su ya extenso universo, puesto que si hablamos de diversidad de tono, quien escribe estas líneas teme que aún queda mucho tiempo que esperar para ver algo medianamente adulto en el MCU.   Y es que Spider-Man: No way home tenía en su mano desligarse, en mayor o menor medida, del humor infantil e impertinente marca de la casa y asemejarse más al Marvel pre-Disney, ese Marvel que, distribuido por el propio Sony, nos dejó la mejor trilogía de la factoría: Spider-Man de Sam Raimi. Pero la cruda y triste realidad es que Jon Watts (de quien no se recuerda título destacable) no es Sam Raimi; no le podemos pedir las virguerías visuales y movimientos de cámara del prodigioso director de Evil dead. Esto no sería ningún inconveniente si hubiese estado rodeado de guionistas de la talla de David Koepp, quien escribiera el magistral libreto de Spider-Man (2002), -además de escribir el guion de Jurassic Park o Misión: Imposible, entre otros mitos del cine de entretenimiento-. Pero Erik Sommers y Chris McKenna (guionistas de las olvidables Ant-Man y la avispa y Jumanji: Welcome to the jungle) optan por el camino fácil e infantil para inundar la obra de chascarrillos tan innecesarios como sonrojantes. Pero no, este previsible pecado no es el mayor que tiene la cinta que nos ocupa. Su más imperdonable error es el de desacralizar el legado que toma, descuidando en todo momento la presentación e inclusión de los personajes (muy maltratados y reducidos al esperpento en la mayoría de secuencias) y dejando todas las decisiones de guion al puro y duro deus ex-machina, echando por tierra cualquier credibilidad que pudiera tener su inexistente trama. 
Póster oficial de Spider-Man: No Way Home y el multiverso
Pero que no se preocupen mucho los fanáticos menos exigentes del Universo Cinematográfico de Marvel; esta película está configurada como un regalo para ellos, para los que aplauden a ocho patas los chistes propios de la marca. Así pues, los amantes más acérrimos del Spider-Man de Tom Holland tienen como obsequio ciento cincuenta minutos que, en honor a la verdad, se pasan en un suspiro. A destacar la primera mitad de la película, donde el siempre interesante Doctor Strange de Benedict Cumberbatch es la estrella de la función, los efectos especiales (una de las primeras escenas protagonizadas por el hechicero es espectacular) y los guiños al fan del Spider-Man cinematográfico y comiquero, que, aunque muchos de ellos no funcionen en su plenitud, servirán para dibujar una sonrisa en el rostro del espectador más permisivo.  En conclusión, Spider-Man: No way home es un producto encomendado al fanservice más accidental (y accidentado) que satisfará al espectador que quiera y sepa pasar por alto su tono infantil, sus arbitrarias decisiones de guion y su endeble trama. Dos horas y media muy amenas que nos dejan efectos visuales en ocasiones apabullantes y un lema muy propicio para avisar al potencial espectador: mejor ir decepcionad@ y así no te decepcionarás totalmente.  LO MEJOR: Benedict Cumberbatch y los efectos visuales y especiales. Su excesiva duración no pesa. LO PEOR: Sus chistes a destiempo, sus decisiones de guion difíciles de defender y el poco respeto de los guionistas hacia los personajes.  NOTA: 5.5/10 @bernax16

‘VENOM: HABRÁ MATANZA’ y crisis de identidad

Título original: Venom: Let There Be Carnage. Año: 2021. Duración: 92 minutos. País: Estados Unidos. Dirección: Andy Serkis. Guion: Kelly Marcel y Tom Hardy. Música: Marco Beltrami. Fotografía: Robert Richardson. Reparto: Tom Hardy, Michelle Williams, Woody Harrelson, Naomie Harris, Stephen Graham, Reid Scott, Peggy Lu, Alfredo Tavares, Amber Sienna, Sean Delaney, Jeff Redlick, Laurence Spellman, Ed Kear, Obie Matthew, Otis Winston, William W. Barbour, Michelle Greenidge, Andrew Koponen, Rodrig Andrisan, Cabran E. Chamberlain… Productora: Sony Pictures Entertainment (SPE), Marvel Entertainment, Pascal Pictures y Tencent Pictures. Género: Fantástico/Acción:Comedia negra/Extraterrestres/Superhéroes/Cómic/Marvel Comics/Secuela. Sinopsis: Eddie Brock (Tom Hardy) y su simbionte Venom todavía están intentando descubrir cómo vivir juntos cuando un preso que está en el corredor de la muerte (Woody Harrelson) se infecta con un simbionte propio.
CRÍTICA (SIN SPOILERS): Cuando hace tres años aterrizó el simbionte de Sony sin Spiderman, a muchos nos olió raro que se pudiera hacer una película de Venom sin el héroe arácnido pero pese a las considerables carencias que tuvo la cinta comercial de Ruben Fleischer funcionó a medio gas, más bien en términos taquilleros que cualitativos aunque siempre diré que dentro de la mediocridad y la peste rancia que pudiera suponer dicha cinta, me pareció entretenida y a ratos divertida gracias a la entrega y lo bien que se lo pasaba Tom Hardy con el personaje (la escena del restaurante me recordó al Jim Carrey más desatado), tanto que para la secuela ha sido acreditado como guionista, y se nota. Cierto es que bajo la dirección de Andy Serkis habría esperado algo más terrorífico, perturbador e impactante, al nivel de los personajes que ha interpretado en el pasado con CGI; también unos efectos visuales asombrosos pero tristemente se quedan a medio gas en varios momentos aunque lógicamente es más difícil de hacer real un simbionte que un animal. Las dos cintas anteriores del director me gustaron bastante y me parecieron arriesgadas en varios compases, cosa que aquí la cinta va a lo seguro y de lo que más me temo es que Sony haya dominado toda la producción para poder enlazar con el spiderverso ya confirmado desde hace un mes. Eso no quita que no puedan disfrutar de la esperada escena post-créditos.
Pero en cuanto a ‘Venom 2’, no se nota atisbos de personalidad o autoría por más que los momentos de discusión casi de pareja entre Venom y Eddie Brock resulten de lo más tronchantes y ya sello de identidad y necesidad para que el espectador no desconecte. Y así es, su mayor virtud son esos momentos existenciales de ambos personajes, esa dualidad, ese conflicto de identidad que logran sacar la parte más independiente de cada uno, la necesidad y la supervivencia dejando de lado la parte más oscura para ser una cinta autoconsciente y paródica llena de humor negro que en algunos compases funciona y en otros se vuelve reiterativa. Hardy se deja la piel de nuevo, quiere volver a interpretar a Venom en un futuro y pese a su involución como actor en cuanto al calibre de sus proyectos, sigue siendo un gran actor menospreciado. En contraste, tenemos a un Woody Harrelson loco una vez más de tantas, lo hace bien pero al igual que con Naomi Harris en modo Dalma de Piratas del Caribe, resultan tan histriónicos y exagerados que incluso cuando se les intenta dar profundidad la cinta les corta porque tiene que acabarse, porque tiene que ser una cinta ligera y en gran parte familiar, al final resultando menos temibles de lo que su título reza.
En definitiva, ‘Venom: Habrá matanza’ es un copia y pega de la primera entrega resultando rutinaria, predecible y convencional, lejana de la profundidad que podría haber dado a sus personajes más allá del propio conflicto Brock – Venom que es lo que rescata a la cinta de la quema además del ritmo y gags con algún guiño que otro (Atentos al de The Amazing Spiderman 2 en el clímax) y se siente una hermana gemela de su predecesora, aportando más bien poco en el contexto y dejando más preguntas que respuestas para quizá cerrarla como trilogía en una entrega crossover donde se aproveche más al personaje de Stephen Graham. Si distingues la parte entretenimiento de la artística, disfrutarás siempre y cuando dejes el cerebro apagado a un lado como con la primera y entiendas la intención que tiene la película, lógicamente lejana de lo que se podría comparar en el terreno de superhéroes pero también lejana del cine superheroico más casposo o aburrido que pudiera haber surgido hace 15 años. LO MEJOR: La relación Venom y Eddie Brock, algunos gags, el ritmo y la escena post-créditos. LO PEOR: Que teniendo margen de mejora hayan ido a lo fácil. NOTA: 6. @starnine27

‘SHANG CHI’ y el legado familiar

Título original: «Shang-Chi and the Legend of the Ten Rings». Año: 2021. Duración: 132 minutos. País: Estados Unidos. Dirección: Destin Daniel Cretton. Guion: Dave Callaham, Destin Cretton, Andrew Lanham. Personaje: Steve Englehart, Jim Starlin. Música: Joel P. West. Fotografía: Bill Pope. Reparto: Simu Liu, Awkwafina, Tony Leung Chiu-Wai, Michelle Yeoh, Fala Chen, Florian Munteanu, Ronny Chieng, Dallas Liu, Tim Roth, Benedict Wong, Meng’er Zhang, Fernando Chien, Kelli Bailey, Ben Kingsley, Tim Roth, Mark Ruffalo, Brie Larson… Productora: Marvel Studios, Walt Disney Pictures, Fox Studios Australia. Distribuidora: Walt Disney Pictures Género: Fantástico. Acción | Artes marciales. Superhéroes. Cómic. Marvel Comics. Sinopsis: Aunque en apariencia sea un aparcacoches de hotel sin ninguna ambición en la vida, Shaun guarda un secreto: su verdadero nombre es Shang-Chi, y es el heredero de un antiquísimo imperio criminal cuyo líder le quiere de vuelta.
CRÍTICA (SIN SPOILERS): Dos años después de que Marvel nos entregase a «Spiderman al descubierto» de la que disfruté bastante pero lejos de lo que el UCM había establecido con su ambiciosa «Endgame» (2019), llega un verano en el que ni «Viuda negra» ni el resto de series de esta fase 4 me habían encandilado lo suficiente tanto a nivel argumental como emocional pero cuando menos lo esperaba, con el héroe más desconocido, como pasó con «Guardianes de la Galaxia» (2014), la sorpresa ha venido para quedarse. ‘Shang Chi’ es una sorpresa en mayúsculas y no solo porque tenga de las mejores secuencias de acción que hemos visto los últimos dos años en cine coreografiando maravillosamente las peleas (atentos a la del autobús, los andamios o el homenaje a «Tigre y dragón» del flashback inicial) o de ambicionar tanto aportando frescura al género de superhéroes y equilibrar un tono perfecto en humor y carga dramática sino en realizar un drama familiar sólido, interesante y sobre todo emocional aparte de la química tangible desde el primer instante entre Simu Liu y Awkwafina, los cuales encajan a la perfección como aciertos de cásting.
Es verdad que pese a las grandes virtudes que posee, puede tener ciertos elementos un tanto evidentes que hacen intuitivo el final además de un cambio totalmente distinto el del clímax a lo que estábamos viendo en su primera parte de la que borraría el humor exagerado y largo del youtuber del autobús (un chiste vale, cuatro no, a mi parecer) además de la famosa venta de humo que nos han vendido con Abominación en los trailers con una presencia ínfima de apenas un minuto aunque nos han contextualizado al personaje y fidelizado el diseño. Por lo demás, se agradece una historia bien contada. Lógicamente la parte social y familiar no iba a faltar como marca de la casa del director Destin Cretton de la que os recomiendo sus tres películas anteriores encarecidamente alejadas de lo que supone un blockbuster y aunque no haya grandes rasgos autorales en esta producción de Marvel al menos se ha desenvuelto bien tanto a nivel de acción y su intensidad como la carga dramática en su brillante desarrollo del héroe y secundarios.
En definitiva, y para no desvelar nada más y puedan disfrutar sin saber nada como me ha pasado a mí. Vayan al cine a la pantalla más grande que puedan y disfruten de este espectáculo de acción, humor y drama familiar que aporta frescura al género, riesgo, solidez y sobre todo entretenimiento. Quédense a todos los créditos porque tiene dos escenas y revisen «Iron Man 3» porque hay una conexión bastante clara. Van a divertirse y emocionarse. Algo que hace falta en estos tiempos que tanto peligra el cine en pantalla grande pero que da gusto que el público fiel de Marvel se haya portado para darle oportunidad a este nuevo héroe oriental que ha venido para quedarse. El mejor producto que ha dado Marvel desde  «Endgame» y la mejor película de acción desde que empezó la pandemia. LO MEJOR: Las escenas de acción, la carga dramática, el villano y la química entre Liu y Awkwafina. LO PEOR: Algún chiste alargado y el evidente final. NOTA: 8. @starnine27

‘VIUDA NEGRA’ y el efecto Weinstein

Título original: «Black Widow». Año: 2021. Duración: 132 minutos. País: Estados Unidos. Dirección: Cate Shortland. Guion: Eric Pearson. Cómic: Don Heck, Stan Lee, Don Rico. Historia: Jac Schaeffer, Ned Benson Música: Lorne Balfe. Fotografía: Gabriel Beristain. Reparto: Scarlett Johansson, Florence Pugh, Rachel Weisz, David Harbour, William Hurt, Ray Winstone, O.T. Fagbenle, Michelle Lee, Olivier Richters, Nanna Blondell, Joakim Skarli, Obie Matthew, Paul O’Kelly, Olga Kurylenko… Productora: Marvel Studios, Zak Productions. Distribuidora: Walt Disney Pictures. Género: Acción. Aventuras | Espionaje. Superhéroes. Cómic. Precuela Sinopsis: Natasha Romanoff, alias Viuda Negra, se enfrenta a los capítulos más oscuros de su historia cuando surge una peligrosa conspiración relacionada con su pasado. Perseguida por una fuerza que no se detendrá ante nada para acabar con ella, Natasha debe lidiar con su historia como espía y con la estela de relaciones destruidas que dejó atrás mucho antes de convertirse en Vengadora.
CRÍTICA (SIN SPOILERS): Dos años sin una película de Marvel en cines ya pesaban por culpa de esta pandemia pero se agradece ir al cine y ver una sala mayormente entregada y casi llena recuperando el ánimo a ir a las salas de cine aunque Disney con su estrategia del acceso Premium en Plus y la piratería frene un poquito el impulso que pudiera generar. «Viuda negra» no llega tan tarde como muchos creían y sirve a la perfección como homenaje a un personaje constantemente cambiante en cuanto a sus relaciones ‘románticas’ se refiere que a mi parecer salvo en las dos últimas entregas de ‘Vengadores’ no terminaba de convencerme, pero con ésta reconozco que la profundidad que le han dado por fin ha conseguido que conecte con ella y eso ya es un gran acierto. Dirige Cate Shortland, responsable de unas pocas películas con mujeres protagonistas enfocadas al cine independiente que aquí quizá deja alguna señal de su enfoque pero claramente Feige lleva el control de todo, como la gran mayoría de blockbusters. Cuando digo que ‘Viuda negra’ no llega tarde es porque ha quedado bastante claro el homenaje y despedida a lo que ocurre en ‘Endgame’, dando por hecho que quien vea la película sabe donde está actualmente el personaje en el Universo Marvel. Feige no ha sido tonto y ha sabido colocar y enlazar su película que pese a ser una precuela de los hechos acontecidos en «Infinity War» (2018), hay una conexión bastante potente como continuación de lo acontecido en «Endgame» (2019).
‘Viuda negra’ es entretenida, bien construida a nivel dramático y la interacción entre los 4 personajes que acompañan a Natasha funcionan de forma orgánica, natural, espontánea y por momentos divertida ya que la química entre ellos funciona como un tiro gracias al guion que construye unos conflictos interesantes y funcionan como una gran familia que tanto hemos pedido para la protagonista. Si bien no es más que un homenaje y una explicación a ciertos cabos sueltos que dejó ‘La era de Ultrón’ (2015) además de un puente hacia una de las próximas producciones de esta fase 4 (véanse las series o no entenderán la escena post-créditos), la cinta no defrauda pero tampoco profundiza y trasciende lo suficiente para una historia que se acerca más a un oportunismo, quizás amoldado a la época que se está viviendo actualmente con Harvey Weinstein encarcelado, y no fluye con naturaleza al haber visto tantas producciones con un discurso más marcado y potenciado por la popularidad que pueda ejercer que por una relevancia y calidad artística aunque el público quiera llamarlo grito de libertad, cuando es más una estrategia de marketing. El mensaje es muy necesario y la cinta lo deja muy claro dentro de lo simple que pudiera explicarse y profundizar poco ya que el personaje de Ray Winstone resulta más un estereotipo que algo realmente memorable. Con esto no quiero decir que las atrocidades que comete el villano sean normales, pero sí algo repetidas últimamente en el cine comercial y que eran un culmen que ya se dejaba caer por los comentarios de Natasha anteriormente en relación a la sala roja y su infancia. Como complemento de ‘Capitán América: El soldado de invierno’ (2014) se agradece ver una cinta madura y adulta aun con sus altas dosis de humor pero carentes del componente emocional que la cinta de los Russo si tenían. También recuerda a ‘Terminator 2’ (1991) en la parte antagonista aunque solo sea a nivel visual en el comportamiento del villano. Con un prólogo bastante prometedor y momentos intimistas muy logrados, la cinta convence y sorprende por momentos pero se queda más manida y predecible de lo que uno podría esperar de la vida del personaje. Pero claro, dentro de un Marvel menor estamos hablando de algo zona media ya que no siempre se puede aspirar a tanto y trascender en el género con cada película. En líneas generales funciona lo cual es comprensible, funcional, respetable con el universo que retrata pero no tan necesaria como pudiera haber querido parecer.
En definitiva, ‘Viuda negra’ es un Sí, un acierto en toda regla, un entretenimiento agradable, divertido, por momentos intenso tanto en la acción como en la música, pero no es la gran aventura, drama o cinta de acción que se podría haber sacado de un personaje tan rico en los cómics según se comenta. Lo bueno es que logra plasmar un mensaje necesario en la sociedad tan tristemente cercano y darle las capas que el personaje necesitaba aunque solo sea para cerrar un círculo y abrir otro. Porque lógicamente no se iba a hacer esta cinta solo para recaudar y homenajear sino para enlazar con lo que nos espera en un futuro. No es lo mejor que ha dado esta casa pero tampoco llegamos a niveles de «Capitana Marvel» (2019) hay cuidado, hay mimo pero no la emoción que se esperaría de un personaje que llevamos una década viendo. LO MEJOR: El mensaje, la química entre los personajes y la inclusión de Florence Pugh al UCM. LO PEOR: La falta de riesgo, emoción, sorpresas y personalidad que sí tienen otras producciones de este género. NOTA: 7 @starnine27

‘FALCON Y EL SOLDADO DE INVIERNO’, el legado y el remordimiento

Título original: The Falcon and the Winter Soldier. Año: 2021. Temporadas: 1. Episodios: 6. Duración media por episodio: 50 minutos. País: Estados Unidos. Dirección: Kari Skogland, Guion: Malcolm Spellman, Derek Kolstad y Michael Kastelein. Personajes: Stan Leey y Jack Kirby. Música: Henry Jackman. Fotografía: P.J. Dillon. Reparto: Anthony Mackie, Sebastian Stan, Emily Vancamp, Daniel Brühl, Desmond Chiam, John Gettier, Miki Ishikawa, Erin Kellyman, Adepero Oduye, Wyatt Russell, Shane Berengue, Neal Kodinsky, Eric Anthony, David Bowles, Brandt Cook, Veronica Falcón, Carl Lumbly, Sinead Phelps, Frank Sorick, Georges St-Pierre, Alexandra McGuire, Angel Nair, Don Cheadle, Dani Deetté, Christopher Cocke, Danny Ramirez… Productora: Marvel Studios. Productor: Kevin Feige, Malcolm Spellman. Distribuidora: Disney+. Género: Miniserie de TV. Acción/Fantástico/Drama/Superhéroes/Spin-off/Cómic/Marvel Comics. Disponible en Disney+. Sinopsis: Se centra en las aventuras de dos personajes del MCU (Universo Cinematográfico de Marvel): Falcon y Soldado de Invierno. Seis meses después de recibir el manto del Capitán América, Sam Wilson se une a Bucky Barnes en una aventura que pondrá a prueba sus habilidades, destrezas y paciencia.
CRÍTICA (SIN SPOILERS): Tras el impacto que supuso WandaVision para muchos espectadores a nivel emocional al retratar a la perfección una historia de superación y duelo pese a la deriva sobrenatural en la que decayó su tramo final, tuvo mayor espacio para desarrollar todo en profundidad y también jugar al despiste de forma efectista en algún que otro personaje que acabó generando unas expectativas ficticias en la mayoría del público en relación al multiverso que llevan anunciando años y aún no han dejado nada claro hasta el momento. Pero dejando de lado ese impacto nos llega otra serie de diferentes características pese a formar parte del mismo universo, con otro tono y otras intenciones, menos extensa y más comprimida, más ambiciosa en cuanto a personajes y menos efectiva en desarrollo con muchos momentos forzados y abruptos, pero tengo que decir que he disfrutado más de esta que de la anterior y eso que tiene menos talento y sorpresas en la trama.
No voy a entrar en spoilers porque no quiero amargar a nadie el visionado. Seré breve explicando que al igual que WandaVision consigue que cuatro personajes que no habían estado lo suficientemente desarrollados conectemos con ellos y en esta aún más al estar un poco más lejos del núcleo de las gemas del infinito. La miniserie explora más en el personaje de Sam Wilson y su legado heredado por el escudo del Capitán América, del cual siempre me pareció un personaje soso y poco interesante pero aquí hace un comentario socioeconómico y racial muy actual que es posiblemente lo mejor de la serie junto al trato de la redención y remordimiento por el pasado de Bucky y como trata de solventarlo de muchas formas porque el tormento es constante. Y sí, es cierto que la serie puede abusar de un humor a veces forzado que no encaja con el tono que era más cercano al de las dos secuelas del Capi América y que el uso de las elipsis es tan abrupto que personajes que parecen una cosa, cambian drásticamente pero posiblemente no sea fallo de intenciones más que de un abultado número de personajes y subtramas que seis episodios se hacen cortos para todo lo que tiene que contar y ciertas cosas resulten obvias y predecibles. Pero en cambio nos da dosis de acción muy bien rodadas, un notable desarrollo de los dos personajes principales y conflictos interesantes en la parte villanos además de una brillante interpretación de Sebastian Stan, en la que posiblemente dé la mejor escena de Bucky en el UCM. Por supuesto los simbolismos alimentan de interés cada capítulo junto al show que roba Daniel Brühl con su Zemo, totalmente opuesto a lo que habríamos imaginado, dotando de diversión y dinamismo a una serie aparentemente plana en puesta en escena.
Pero finalmente, la serie sale a flote dentro de sus defectos narrativos más asociados al guion y montaje. Quizá las prisas no le han jugado a favor y aún resultando de lo peor que ha dado el UCM en términos cualitativos, no deja de resultar un entretenimiento relevante y necesario para conocer más allá del chasquido y las consecuencias sociales acarreadas además del abuso de poder y la ambición. Me parece una serie disfrutable a nivel personal que con sus peros he disfrutado más que otras cintas de Marvel encumbradas como «Black Panther», «Spiderman Homecoming», «Capitana Marvel», «Thor 2» o «Iron Man 2». Quizá no sea el producto que muchos esperasen porque el nivel está muy alto, pero a nivel visual cuenta con planos muy cuidados, un ritmo vibrante, un buen trabajo de Henry Jackman en la B.S.O. rescatando temas identificativos y un tono en la mayoría de las veces acertado que ha hecho que Disney Plus nos siente cada viernes y no pestañeemos con su pequeña dosis de Marvel cada semana. Espero que «Loki» mejore ciertos errores pero tampoco queme al personaje ya que de todos los que tienen su serie es el que más cosas sabemos. LO MEJOR: Los dos protagonistas, Zemo y los mensajes potentes sobre la redención y lo que significa ser el Capitán América además de la acción. LO PEOR: Su ambición de subtramas y personajes acaba lastrando el guion y recurra a las conveniencias. NOTA: 7 @starnine27

«VENGADORES Endgame: EL FIN DE UNA ERA».

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Título original: Avengers: Endgame

Año: 2019
Duración: 181 min.
País: Estados Unidos
Dirección: Anthony Russo, Joe Russo
Guion: Christopher Markus, Stephen McFeely (Cómic: Jim Starlin. Personajes: Stan Lee, Jack Kirby)
Música: Alan Silvestri
Fotografía: Trent Opaloch
Reparto: Robert Downey Jr., Chris Evans, Mark Ruffalo, Chris Hemsworth, Scarlett Johansson, Jeremy Renner, Don Cheadle, Paul Rudd, Brie Larson, Karen Gillan, Josh Brolin, Benedict Cumberbatch, Chadwick Boseman, Tom Holland, Zoe Saldana, Evangeline Lilly, Tessa Thompson, René Russo, Elizabeth Olsen, Anthony Mackie, Sebastian Stan, Tom Hiddleston, Danai Gurira, Benedict Wong, Pom Klementieff, Dave Bautista, Letitia Wright, John Slattery, Tilda Swinton, Jon Favreau, Hayley Atwell, Natalie Portman, Marisa Tomei, Taika Waititi, Angela Bassett, Michelle Pfeiffer, Michael Douglas, William Hurt, Cobie Smulders, Sean Gunn, Winston Duke, Linda Cardellini, Maximiliano Hernández, Frank Grillo, Hiroyuki Sanada, Tom Vaughan-Lawlor, James D’Arcy, Jacob Batalon, Vin Diesel, Bradley Cooper, Gwyneth Paltrow, Robert Redford, Chris Pratt, Samuel L. Jackson, Alexandra Rachael Rabe, Ross Marquand, Joe Russo, Emma Fuhrmann, Michael James Shaw, Terry Notary, Yvette Nicole Brown, Callan Mulvey, Taylor Patterson, Ken Jeong, Ty Simpkins, Stan Lee
Productora: Marvel Studios
Género: Ciencia ficción. Fantástico. Acción.

Crítica: No han pasado ni 19 horas desde que salí de la sala donde ayer pude visionar Vengadores: Endgame y he de reconocer que la emoción aún me embriaga. No será quien escribe estas líneas sospechoso de ser un fan ciego de la factoría Marvel, más bien al contrario, pues, aunque me han entretenido la mayoría de las cintas que conforman este universo, pocas me han conseguido tocar el corazón. Afortunadamente, la película número 22 del MCU (Marvel Cinematic Universe) y la cuarta entrega de Avengers sí ha logrado tal hazaña.

Sin desvelar nada de la trama (contar una mínima parte de la misma sería caer en el spoiler), hay que hablar de los muchos aciertos que lleva consigo el penúltimo film de la fase 3 del universo MARVEL, que no son pocos. En primer lugar hay que destacar su tino a la hora de distanciarse del estilo de la mayoría de sus hermanas, columpiándose de la rama más dramática del género de superhéroes tan aplaudida en los últimos años (El caballero oscuro o V de Vendetta son ejemplos de ello) sin caer al suelo en ningún momento. Así pues, en este film, los hermanos Russo y los olvidados guionistas (¡qué denostada está la función del escritor!) Christopher Markus y Stephen McFeely profundizan en el lado más humano de los archiconocidos y múltiples superhéroes que aquí encontramos. Esto hace que empaticemos, más que nunca, con los personajes, unos personajes distribuidos perfectamente en la trama, pues ninguno de los protagonistas adolece de escasez de secuencias en un largometraje de 180 minutos de duración. De esta manera, cada uno de los vengadores y los guardianes de la galaxia que sobrevivieron a los acontecimientos ocurridos en Vengadores: Infinity War tienen su parcela en esta aventura. Cada uno con su misión, sus anhelos y sus temores, aspectos que mueven sus acciones y remueven los corazones de unos espectadores que verán, con lágrimas de emoción en sus ojos, cómo una etapa vital que ha durado once años llega a su fin.

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Es esta naturaleza emocional que caracteriza Vengadores: Endgame lo que la sitúa en un escalón por encima de las anteriores películas de Marvel/Disney. Por un lado, la llamada casa de las ideas ha sabido proporcionar al fan el homenaje que merece (y el que necesita), presentando guiños y más que guiños a las otras 21 películas del MCU, devolviendo a la gran pantalla multitud de personajes que habían caído olvidados en el ostracismo e impulsando otros que estaban teniendo un papel menos relevante dentro de la saga que nos concierne. Por otro lado, las escenas finales cargadas de épica y emoción y el equilibrio perfecto entre el drama y la acción hacen de este film el mejor regalo posible para los fans que han disfrutado de estos héroes durante once años.  

En definitiva, Avengers: Endgame es el mejor final posible a una saga que, ladrillo a ladrillo, ha construido un universo cinematográfico que pasará a la Historia del entretenimiento no sólo por amasar millones de dólares en todo el mundo y acercar al cine a medio mundo, también por crear un esquema narrativo que muchos han intentado copiar y muy pocos han conseguido llevar a buen puerto. Afortunadamente, el puerto a alcanzar por MARVEL aún está lejos y a pesar de que éste es el final de un camino, también es el principio de uno nuevo. Nuevo y emocionante.

LO MEJOR: El perfecto equilibrio entre drama y acción. La evolución de los personajes, los homenajes a todo el universo UCM y la emoción de muchas de sus escenas.

LO PEOR: Que Marvel/Disney haya tardado 11 años en hacer una película de esta altura.

NOTA: 8/10

@bernax16